jueves, 29 de mayo de 2008

El apocalipsis de la cosmología (2)

En los últimos 5.000 millones de años, el universo se expansiona debido a la antigravedad cósmica, una energía oscura asociada al espacio vacío que Einstein denominó “constante cosmológica”.
En 100.000 millones de años, el Grupo Local (Láctea, Andrómeda y galaxias enanas), se derrumbará sobre si mismo formando un supercúmulo de estrellas. Las demás galaxias se perderán más allá del “horizonte de sucesos”, una superficie imaginaria en la cual ni la materia ni la radiación nos pueden alcanzar.
Como sugiere Lawrence Krauss, del departamento de Astrofísica de la Universidad de Nashville,”podríamos estar viviendo en la única época de la historia del universo en la que resulta posible adquirir un conocimiento preciso de su verdadera naturaleza”.
Al hilo de estas informaciones, reflexiono sobre lo ingenua que resulta la fe que depositamos en la ciencia, sin advertir que en la mayoría de las ocasiones todo conocimiento científico finaliza en un “horizonte de sucesos”, en una incógnita irresoluble, en un muro infranqueable, en la nada…
En el caso de la incertidumbre cósmica, Einstein veía una forma de religiosidad... Pero esto es tema para otro día.

4 comentarios:

Pele Ón dijo...

Cuando Dios hizo el tiempo, hizo mucho, pero no me imaginaba que tanto.
Cuando hizo la luz, un tío muy tacaño ya debía 4 meses...

Anónimo dijo...

Por eso,-tras los animales y las plantas-,tuvo que crear al "cobrador del frac"

Pele Ón dijo...

Y lo último de lo último, a la Mujer.
Sabes aquet que diu...
Cuando Adán le pidió a Dios una compañera, le contestó:
Eso cuesta mucho: medio cerebro, una pierna, un brazo, medio hígado, un huevo....
Adán, tras pensárselo un rato, le dijo:
¡Dios!: ¿qué me das por una costilla?

Anónimo dijo...

Reflexiono también sobre lo ingenuo que resulta la fé que depositamos sobre la religión, sin advertir que en la TOTALIDAD de las ocasiones, todo conocimiento religioso(?????) finaliza en un "horizonte de FÁBULAS", en una incógnita irresoluble, en un muro infranqueable, en la nada