sábado, 31 de mayo de 2008

El sentimiento religioso

El catedrático de Física de la Complutense de Madrid, Antonio Rañada, describe la clasificación que Einstein utilizaba para sistematizar los fenómenos religiosos.
1.-Un primer grupo podría denominarse de la “religión del miedo”, que es la de los seres primitivos ante las fuerzas de la naturaleza.
2.-Un segundo grupo estaría constituido por la “religión del amor”, que se corresponde básicamente con los enunciados del Antiguo y Nuevo Testamento.
3.-Un tercer grupo,-que el físico veía más cercano a sus vivencias-es el del “sentimiento cósmico religioso”, que descansaría en la armonía de la naturaleza. Lo considera difícil de explicar a quien no lo tiene y lo ve en los Salmos de David y en el budismo. Pone como ejemplos a S. Francisco de Asís, Espinosa y Demócrito.
El periodista asturiano Javier Neira comenta que “Einstein adoraba el universo y las leyes de la física, que el Cosmos le inspiraba un sentimiento religioso parecido al panteísta, aunque rechaza este término por emocional. Lo suyo, decía, era racional”.
Veamos lo que el eminente científico opinaba sobre sí mismo “Sí, soy muy religioso; al intentar llegar con nuestros medios limitados a los secretos de la naturaleza encontramos que detrás de las relaciones causales discernibles queda algo sutil, intangible e inexplicable; mi religión es venerar esas fuerzas que están más allá de lo que podemos comprender. En ese sentido, soy muy religioso”
Amén

1 comentario:

Pele Ón dijo...

El reduccionismo ataca con ferocidad totalitaria, pero cuanto más vemos, más nos damos cuenta de lo que nos falta por ver.
La desesperación más absoluta consiste en imaginarse que el universo carece de sentido (Chesterton)