miércoles, 21 de abril de 2010

Reeducando a una lesbiana

¿Es posible el amor sincero entre un hombre de 60 años y una mujer de 40?
¿Puede la ternura de un varón reconducir hacia la heterosexualidad a una lesbiana?
No respondas todavía, estimado bloguero, que aun no te he acabado de preguntar.
¿Podría considerarse que la seducción que ejerce una mujer joven sobre un hombre sexagenario es el anticipo de una previsible y dramática humillación para este último?
¿Resultan imprescindibles la estabilidad emocional y/o el furor pasional para reverdecer un espíritu creativo dormido?
Estas son algunas de las preguntas –retorcidas- que trata de responder el multilaureado Philip Roth en su último libro titulado “La Humillación”
No soy un apasionado de la narrativa norteamericana contemporánea, (Cormac McCarthy, Thomas Pynchon, Don DeLillo), e intelectualmente poco me inspira ese manantial inagotable de best-sellers (de menos de 50 folios de extensión) que se venden como churros.
Tampoco me seduce, por tanto, el estilo literario de este prolífico escritor estadounidense (premio Pullitzer, candidato al Nóbel), aunque reconozco que su prosa es directa, efectiva, casi periodística, una prosa que mantiene magníficamente el ritmo y que se erige en instrumento dúctil para desarrollar las escabrosas situaciones que el autor presenta.

Una buena sugerencia si no tienes nada que hacer entre el final de la cena y la hora de irte a dormir.

En su defecto, puedes enchufarte a Tele-5.

O leer elsubmarinobajoelgrifo.

36 comentarios:

Pele Ón dijo...

La sociología es una ciencia continua, no discreta. Y las relaciones personales menos discretas aún.
Lamento por esta vez no tener más repuestas que las relativas, y enchufar un poco de tolerancia intravenosa, que falta nos hace a todos.

Daeddalus dijo...

Phillip Roth no deja indiferente, dispara directo, Bang… En cuanto termine, e incluso antes, lo que estoy leyendo (que me está costando porque para snob yo leyendo n’asturianu), voy a ponerme con ese libro.

Por otro lado, cuando tenía 20 me enamoré de uno de 50, pero las que acabamos humilladas fuimos yo y la respectiva.

N. Matsuda dijo...

Muy buenas preguntas y la verdad no tengo la menor idea de la respuesta. Nada interesante mi comentario pero hoy es uno de esos dias en que mi cerebro anda dormido sin querer tener pensamiento alguno.

Vere si hay una version aqui para primero echarle una ojeada, y es que a veces los libros al ser traducidos pierden un poco su encanto.

Luis dijo...

Joer Turdu... como se nota que andes en submarino.... pases de la superficie de unos calzoncillos rojiblancos sin pelotas... a las profundidades abisales de la psico-sociología... vas volvenos llocos a toos... como a mi tampoco me gustan los escritores yankis, salvo excepciones y ademas ni he leido el libro... ni pienso hacerlo... además de ser de ciencias que ya sabes somos algo cortitos.. Voy respondete... NO tengo ni puta idea. Abrazu amigu....

solitaria de la amncha dijo...

Creo que tengo que tomar otro cafe antes de responder ...todavia estoy espesa.
Eso si,viendo lo fino que hila la gente,a ver cuanto tardan en tirarsele al cuello por una frase de su comentario...
Por cierto sr luis,no es por que sea de ciencias,es por ser de gijon! jejejej
Saludos a ambos-dos

Luis dijo...

Solitaria Carabayona-Manchega... ya hablaremos largo y tendido usted y yo-"ambos" Lo de su "espesura" me temo no se lo arregle ni toda la producción de café de Colombia... no ye na personal ehhh... Besucu

Mery Jane dijo...

Dios, Tordon...menudas preguntitas que te marcas hoy eh??

La verdad es que soy de las que creen que el amor no tiene edad, pero sí heterosexuales. Fíjate (no me excomulguéis por esto) que a día de hoy no creo en el enamoramiento real entre personas de igual sexo, y aún menos que estas personas puedan adoptar niños. Soy muy escéptica con eso, pero no me entendáis mal; soy tolerante y no discrimino a nadie para nada eh? Siempre he conocido a gente homosexual, incluso he trabajado con algunos en temas educativos, y los respeto como a todos los demás.

Sólo es que no creo en ello y punto, por lo cual que un hombre haga heterosexual a una lesbiana no me extraña en absoluto, porque la naturaleza humana es así, hetero, no homo.
Pero como bien dice Pele Ón, la sociología es una ciencia continua, supongo que dinámica en las relaciones interpersonales y, por muy difíciles que sean de entender algunas cosas, hay que aceptarlas.

Un saludo

Mery Jane dijo...

El resto de preguntas tengo que pensarlas un poco, creo, antes de responder.

Maky dijo...

Una lesbiana no se puede volver heteresexual porque la sexualidad es innata. El lesbianismo puro comienza en la niñez, la niña lesbiana tiene fantasías con sus maestras de jardin de infantes, con sus compañeras de grado, intenta besar o tocar a sus amigas, sus juegos son lésbicos. Eso no se puede cambiar por más tierno que ser un hombre, o por más que tenga el pene grande o mucho dinero. Una lesbiana siempre será lesbiana, ejemplo Sandra Mihanovich, Jodie Foster, Ellen, etc... Esas mujeres tienen su sexualidad resuelta y nada las puede cambiar. Cuando las lesbianas son adolescentes aún no se dan cuenta de lo que son y tienen un par de novios pero luego cuando descubren que su verdadero camino son las mujeres se definen sexualmente para toda la vida y nunca más con un hombre.

Pero el caso de las bisexuales es distinto, porque son mujeres que nacen con gustos por ambos sexos, y las bisexuales sí podrían tener relación emocional con un hombre.

Pero una lesbiana jamás, porque la mayoría son feministas y mesiándricas, (la misogenía femenina hacia los hombres) y cuanto más lesbianas son, más desarrollan un sentido de asco hacia el sexo opuesto, que es la afirmación a su sexualidad. Les repugnan los hombres y los genitales masculinos.

Todo lo que se ve en las películas de un hombre con dos mujeres, los trios y todo eso, es bisexualidad pura. Una lesbiana de verdad jamás metería en la cama a un hombre (no me imagino a Sandra Mihanovich haciendo un trio con un hombre). A las lesbianas de verdad no las reeeducas con nada, una sexualidad no se puede cambiar, es como la piel,los ojos, y el ser mismo de la persona. Se nace así.

Anónimo dijo...

NO tengo el gusto de haberlos leído, pero lo anotare para una próxima lectura.

Gracias por compartir.

Saludos.

Isbela dijo...

Tema muy interesante señor Tordon el que unsted plantea hoy aqui.

Sincermanente pienso que el lesbanismo no es algo que haga falta reeducar.Cada uno en su alcoba invita a dormir a quien quiere.Y la homosexualidad es tan digna, y tan real como la heterosexualidad.Pues suerte tengo un buen amigo que es homosexual, y quiere,respeta y ama a su pareja mejor incluso que muchos heterosexuales.Ojala, lagun dia encuentra a un hombre que me quiera como lo hace el con su amor.

Y a su otra cuestion planteada señor Tordon el amor por propia exoeriencia le pudeo decir; que no tiene edad.El amor propia mente dicho no entiende de ninguna barrera, y si por suepuesto al menos para mi, que una pareja con esa diferencias de edad se pueden amar de verdad.Pero cierto tambien es que las difeencias de edad suponen, una prueba demasiado grande que pocas parejas logran salvar.Un saludo mi querido señot Tordon jajajajaja

Tordon dijo...

Leñe, Peleón , cada dia escribe usted mejor pero le entiendo menos.
¿A quién se refiere con la de la tolerancia? ¿A los enamorados? ¿A las lesbianas? ¿A los sexagenarios?

Coño,no sea tan continuo ,tan relativista y tan discreto y explíquelo.

Salu2

Tordon dijo...

Cuando acabe de recrearse con la llingua, estimada Daedalus, tiene que contarnos esa su historia de los 20años.Seguro que es más interesante que la de Roth.

Besinos

Tordon dijo...

Todos tenemos días, querida Lunática, en los que nuestra mente es igual que un desierto.
Pero siempre -en la noche más oscura- acaba surgiendo el rayo clarificador.

Solo hay que esperar pacientemente

Besotes

Tordon dijo...

Hay que reconocer, estimado Luis, que usted es un tipo sincero.(y sidrero)
Y por si le sirve de consuelo,le diré que yo también soy de ciencias.
Y es que las penas compartidas son siempre menores.

Abrazu, supersidreru.

Tordon dijo...

Querida Solitaria de la mancha de tomate:
Para estar usted espesa,¡vaya como se las tira por la mañana a los del culo moyau...!

Aunque estoy convencido que todo- en el fondo- es porque les queremos.
Y porque la socarronería asturiana tiene que "desfogar" por algún lado.

Besotes

Tordon dijo...

Como es habitual, estimada Merillein, sus comentarios son propios de una persona seria y coherente.
Y respetuosa con las opiniones ajenas.
Bss

Tordon dijo...

Piense, piense ,Merillein, y escúpalo rápido , que nos tiene en ascuas...

Tordon dijo...

Interesante su exposición, desconocido Blogger.
Y la contundencia en la mayoría de sus afirmaciones me hace pensar que sabe de lo que habla.
Agradezco su aportación y espero verle más a menudo por estos lares.
Saludos cordiales

Tordon dijo...

Gracias a usted, Señor Pliego , por obsequiernos con su magnífica poesía.
Salu2

Tordon dijo...

Considerando que es usted toda una experta en cuestiones amatorias, mi querida Isbela de Miedomedás, doy por buenas todas sus reflexiones al respecto.

Besos platónicos (y en su caso, atómicos)

Pele Ón dijo...

Por alusiones, se lo ha buscado: le contesto:
Como hacían en el antiguo programa presentado por Balbín, "La Clave", sirva una película para ilustrarnos: la última de Woody, la de "Si la cosa funciona..." de la que decía en un comentario reciente:
Nuesto querido Woody, como siempre: agnóstica, costumbrista, ácida, cerebral, autobiográfica, neurótica... suple sus aspiraciones profundas filosóficas y religiosas a través de la mera satisfacción sexual, aunque cada vez mejora en sus justificaciones. Posiblemente para Woody, el fin del mundo se identifica con la pitopausia, aunque ahora con la viagra le habrán dado una prórroga. No le envidio, por muy rico que sea, no le llegará para psicoanalistas.
En resumen: el sexo (no distingo si unos, otras u orgasmotrón onanimétrico mucilaginoso) es un medio accesorio, por mucho que lo queramos entronizar.
Por otra parte, un libro maravilloso, titulado "Moral, el arte de vivir", que es uno de mis favoritos, dice que lo que ocurre, en la orquesta de nuestra vida, es que el sexo hace mucho ruido, tenemos que manejarlo con cuidado para que no se nos apodere. El autor es un cura del Opus Dei, si alguien se lo compra, que avise que hay que filtrar algunas cosas, no vayamos a comerlo con la concha, como Obélix las ostras, le daré mi opinión.
Como contrapeso, también es muy bueno el clásico imprescindible para nuestra juventud de "Ética para Amador", de Savater, cuyo criterio, como es de suponer, no coincide demasiado con el del cura.
También hago referencias directas al sexo en mi ensayo sobre "Drogas" que publiqué hace mucho en el blog.
En fin, ya ve que de todo menos discreto en el continium espacio-tiempo.
Por último, no se olvide. La materia no existe, es una condensación de la energía, aunque reconozco que el fractal "Jolie" está bastante bien desarrollado, es una ilusión muy bien programada en esta "Matrix".

Tordon dijo...

Caramba, Peleguán, he hecho bien tirándole de la lengua, porque nos ha regalado un comentario espectacular.
Coincido con usted en lo fundamental, aunque le pego un fuerte tirón de orejas por asegurar que mi Jolie es solo un ente programado.
Porque eso es como decirle a un niño que los reyes son los padres.

¡Buaaaaa....!

Topanga dijo...

Tordi, procura usar camisas de colores más oscuros... a menos que no te importe que se te marquen los pezones. Ay, cómo te gusta provocar.

Te quiero mucho.

Mery Jane dijo...

Preguntas:¿Podría considerarse que la seducción que ejerce una mujer joven sobre un hombre sexagenario es el anticipo de una previsible y dramática humillación para este último?
Respondo: No tiene por qué.

Preguntas:¿Resultan imprescindibles la estabilidad emocional y/o el furor pasional para reverdecer un espíritu creativo dormido?
Respondo:Puede que sí, pero es una pregunta difícil ésta; después de reflexionar sobre ella he llegado a la conclusión de que no necesariamente son imprescindibles, porque a veces pasa que un estímulo inesperado te motiva para crear nuevas ideas. ¿No te ha pasado muchas veces que el pensamiento más inesperado te inspira nuevas ideas? Pues eso; a mí me pasa muchas veces en mi trabajo. Pues en lo creativo debe ser algo similar.

Estimado Blogger:
Sé que todas tus afirmaciones se basan en estudios y evidencias científicas, pero te hago una pregunta personal:¿entiendes de veras la bisexualidad? Porque yo no, y algunos que otros homosexuales te puedo asegurar que tampoco.Tuve un debate muy interesante sobre el tema con el presidente de Xente Gai Astur (XEGAS)en una ocasión. Pero en fin, eso es otro tema...
Pero estoy de acuerdo con todo lo que dices del lesbianismo, es absolutamente cierto.

Tordon dijo...

Mis pezones son arrebatadores, mi querida Topiña, pero mucho menos que los suyos.

Yo también la quiero, musa surrealista.

Tordon dijo...

Supongo , docta Merillein, que sobre el asunto de la pareja sexagenario-jovencita , el autor sobreentiende que -en caso de fracaso de la relación- le resultaría más fácil rehacerse sentimentalmente a una mujer joven que a un hombre entrado en años.
Se sumaría, además, el inevitable sufrimiento psicológico derivado de la convicción de que a uno le abandonan por viejo.
Y si hablamos de una sexagenaria con un jovencito, ocurriría lo mismo, por supuesto, aunque este último caso se da con menos frecuencia.

Por otra parte, del tema de la homosexualidad, nada entiendo, pero tengo algún amigo que pertenece a ese colectivo. Y de él –que es lo que conozco- solo puedo decir que es una persona muy correcta y agradable.

En cuanto a la bisexualidad, ni puñetera idea, pero le aseguro que nunca me verá en un fregado de esos.: ¡Con una sola señora ya se me acumula el trabajo…!

Eso sí, soy un hombre responsable, de los que trabajan a conciencia.

Un saludo y gracias por sus reflexiones

Noite de luNa dijo...

Si una relación empieza pensando en el futuro fracaso y decepción, mejor no empezarla. La edad no importa demasiado.

Si pienso friamente en lo de la edad.
Sí,importa con el paso de los años.

No me atrevería a reeducar a nadie.

Tordon dijo...

Sus palabras , estimada NochedeLuna,demuestran que tras su cara de "pelotilla amarilla sonriente" se esconde una persona sensata y sosegada.

Quédese usted cuanto quiera, será un placer tenerla entre nosotros.

Besos

Daeddalus dijo...

Mery Jane... por mi parte sí creo rotundamente en la bisexualidad. Hay personas que simplemente se enamoran de otra persona, con independencia de su género.

Tordon dijo...

Supongo, estimada Daedalus, que para no perdernos en generalidades tendríamos que definir primero el concepto de "enamoramiento".
Es solo una propuesta.

A la espera de lo que diga Merillein, por supuesto.

Mery Jane dijo...

Lo sé Tordon, lo sé, respecto al sexogenario con la jovencita, me refiero, pero insisto en que no tiene por qué.Cada persona y relación es un mundo y habría que verlo.

Respecto al enamoramiento y su definición os remito a un excelente artículo sobre el tema de un amigo mío:

http://cienorgasmologia.blogspot.com/2008/02/el-enamoramiento-crnica-de-una.html

Os remito a él porque es el que más sabe de estas cosas que yo conozca,y el que mejor lo explica. No penséis mal del hombre por el nombre del blog eh? Es un tío serio y sabe de lo que habla, aunque a algunos posiblemente os parezca que no.
Tiene muchas cosas discutibles en el blog, hay que reconocerlo,pero en ésto tiene toda la razón.
También hay que destacar que por su trabajo sabe mucho de neurociencias e historia, así que no prejuzguéis.

Daeddalus: cuando dices que "Hay personas que simplemente se enamoran de otra persona, con independencia de su género" te refieres a los homosexuales, no a los bisexuales.No me entiendas mal, yo eso sí lo puedo entender, pero en el caso de los bisexuales me resulta imposible, lo siento.
Si alguien puede darme una explicación razonable, que no se corte eh? Porque a mí del tema meramente sexual no me sacan; osea, que le molen las relaciones íntimas con los dos bandos vale, pero de ahí a que se puedan enamorar al 50% con hombres y mujeres,...como que no eh?
En fin, no sé.

Anónimo dijo...

Pues la verdad y con conocimiento de csausa les digo que quiza no se vuelva hetero, pero si bisexual, y saben muy rics los besos de mujeres les, y claro que se puede enamorarlas y porque no decirlo asi encaminarlas por el buen sendero, en ese proceso estoy,enamore a mi amiga les y ahora quiero retener su amor porque porque me clave mucho con ella, me costo mucha pasiencia en optener su querer y por eso lo valoro mucho mas te quiero mucho linda

Anónimo dijo...

de algo estoy seguro el amor cuando es sincero siempre sale vencedor y la edad ni el sexo importa, yo soy varon tengo 38 y mi novia 23 y ella es les y aun asi nos queremos, y que ricos saben sus besos saben a amor y sobre todo a triunfo y gloria

Unknown dijo...

Todos los niños pasan por una etapa de enamoramiento de la madre. El enmadramiento de un niño tiene por función la asunción de su parte femenina. A la etapa de identificación con la madre (EDIPO), en la que aprende a remitir sus conductas violentas, a atender su centro femenino y potenciar la comunicación, le sigue una etapa durante la pubertad en la que el padre es su modelo (de faltarle debería encontrar otro modelo en un abuelo, un tío o un hermano mayor) en la que desarrollará los arquetipos del aventurero, el cazador,. Si la etapa EDÍPICA se alarga o el modelo masculino no existe, el niño se quedará en la etapa edípica, femenina. Por eso, tendrá muchas probabilidades de que, cuando se desencadenen sus instintos sexuales, sus costumbres femeninas le lleven a sentir deseos por el sexo opuesto a su sensibilidad. En la escuela, los niños se burlarán de él, de su feminidad, con lo que no participará en sus juegos de machos, se refugiará en la compañia de las niñas y, pese a que los genitales le puedan engañar, acabará sintiendo deseos por lo opuesto.
Del mismo modo las niñas se enamoran de su padre para despues, cuando les llega el periodo, identificarse con su madre. De no tener su referente masculino, si no pasa por su correspondiente fase de Electra, bien porque tenga aversión al padre (alcohólico, yonqui, violento), bien porque la madre le haya hecho odiar a los hombres debido a su resentimiento, bien porque el padre no exista (adopción lesbiana, separación violenta de los padres), intentará sustituir su falta de referente masculino, masculinizándose ella misma. En los juegos del colegio se convertirá en la 'marimacho' y, cuando llegue el despertar sexual, se inclinará por su propio sexo. Si se cría sin la madre le faltará una figura de referencia fundamental para desarrollar su sexualidad femenina, de ahí que la adopción por parte de una pareja homosexual masculina podría acarrear graves problemas de identificación sexual a una niña.

Unknown dijo...

Todos los niños pasan por una etapa de enamoramiento de la madre. El enmadramiento de un niño tiene por función la asunción de su parte femenina. A la etapa de identificación con la madre (EDIPO), en la que aprende a remitir sus conductas violentas, a atender su centro femenino y potenciar la comunicación, le sigue una etapa durante la pubertad en la que el padre es su modelo (de faltarle debería encontrar otro modelo en un abuelo, un tío o un hermano mayor) en la que desarrollará los arquetipos del aventurero, el cazador,. Si la etapa EDÍPICA se alarga o el modelo masculino no existe, el niño se quedará en la etapa edípica, femenina. Por eso, tendrá muchas probabilidades de que, cuando se desencadenen sus instintos sexuales, sus costumbres femeninas le lleven a sentir deseos por el sexo opuesto a su sensibilidad. En la escuela, los niños se burlarán de él, de su feminidad, con lo que no participará en sus juegos de machos, se refugiará en la compañia de las niñas y, pese a que los genitales le puedan engañar, acabará sintiendo deseos por lo opuesto.
Del mismo modo las niñas se enamoran de su padre para despues, cuando les llega el periodo, identificarse con su madre. De no tener su referente masculino, si no pasa por su correspondiente fase de Electra, bien porque tenga aversión al padre (alcohólico, yonqui, violento), bien porque la madre le haya hecho odiar a los hombres debido a su resentimiento, bien porque el padre no exista (adopción lesbiana, separación violenta de los padres), intentará sustituir su falta de referente masculino, masculinizándose ella misma. En los juegos del colegio se convertirá en la 'marimacho' y, cuando llegue el despertar sexual, se inclinará por su propio sexo. Si se cría sin la madre le faltará una figura de referencia fundamental para desarrollar su sexualidad femenina, de ahí que la adopción por parte de una pareja homosexual masculina podría acarrear graves problemas de identificación sexual a una niña.